Cuando llenos y exhaustos
estén mis ojos.
Y cuando el alba cubra
mi retina oscura,
la tierra me abrazará.
Será la oscura dama,
que ponga fin a mis días,
y a mis noches.
Será quien me alejará,
de todo lo que conocí.
Será quien me abrigará,
para recordar quién fui.
A la hora de saberlo,
me llevaré
mis mejores sentimientos.
A la hora de saberlo,
me quedaré
para romper malos recuerdos.
En mi lecho encontrarás,
dos rosas:
una negra,
otra roja.
Cuando la tierra me abrazará.
Ermitaño.